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Por: Daniel Bernal.
En lo que antes fue un espacio verde y luego se convirtió en un campamento, ahora reina el ladrillo y el cemento. El panorama en la parte baja del humedal La Conejera (Zona de reserva) no puede ser más demoledor, en la zona ya se terminan de levantar las torres de apartamentos de el proyecto de vivienda “Reserva Fontanar”.
Un ANTES (4 de Mayo de 2015) y un DESPUÉS (17 Octubre de 2015):
Ni las caminatas, las marchas, las protestas, los artículos periodísticos, las redes sociales y la avalancha mediatica fue suficiente para detener la construcción.
Al pasar por el lugar, recordamos el campamento de protección del humedal La Conejera y sus 211 días de lucha por nuestro humedal y rechazamos la forma violenta como fueron arrazados por el ESMAD y la Policía el 4 de Mayo de este año.
Recordando la zona antes verde, luego con el campamento y ahora con edificios de 5 pisos nos preguntamos: ¿ya todo esta perdido?, ¿que paso con el proceso?, ¿que es lo que ha ocurrido en estos meses?. Nada mejor que Mauricio Castrillón Quiroga, el «Profe Tingua» para que nos cuente, desde el mismo humedal y de manera completa, el estado actual del proceso:
Y el mensaje final que nos deja esta reflexión, tan apropiado para el momento y escrito sobre la polisombra de la construcción, del gran escritor chileno Pablo Neruda:
«Podrán cortar las flores, pero no detendrán la primavera».
Autor: Daniel Bernal, daniel@humedalesbogota.com, twitter: @danielbernalb
Si no se ha detenido la obra es por la eficiencia de la justicia en colaboración con los medios masivos de comunicación la; comunidad seguirá resistiendo hasta que los magistrado diriman el caso. POR UNA JUSTICIA INDEPENDIENTE DE LOS ENTES ADMINISTRATIVOS LA CONEJERA RESISTE.