Por: Daniel Bernal.
El 6 de Febrero de este año, visitamos el humedal La Conejera con un grupo de amigos para observar varios cambios y arreglos que se vienen haciendo al humedal.
Cerca a la entrada del humedal, nos asomamos a un pequeño claro de vegetación, algo escondido, que se encuentra en esa zona. Al salir pude avistar un gavilán raro, no se me hizo familiar con ninguno de los tradicionales gavilanes y rapaces de la sabana, por su color negro y forma.
Estaba perchado en los sauces que dan al costado norte del humedal muy tranquilo y solitario.
Luego de este avistamiento seguimos con la visita normal al humedal.
Para nuestra sorpresa el gavilán avistado era un Caracolero común (Rostrhamus sociabilis) un nuevo registro ornitológico para el humedal La Conejera y un registro ocasional en la Sabana de Bogotá. El registro más cercano fue el año pasado en el río Bogotá. Este registro corresponde a un ejemplar juvenil por su tamaño, forma y plumaje.
El Caracolero común es un ave rapaz de 41 a 46 cm. de altura, envergadura tamaño medio a largo. Su cuerpo es de color negro con una linea blanca de plumaje en la cola. Su pico es muy puntiagudo pasando del amarillo tradicional a negro en la punta.
Su distribución principal está por debajo de los 1000 metros de altura en la región Caribe, desde el golfo de Urabá hasta la base de la Sierra Nevada de Santa Marta. De vez en cuando se tienen registros fuera de estas zonas. (1)
Con este tipo de avistamientos seguimos confirmando la alta biodiversidad de nuestros humedales bogotanos y su papel importante en el cuidado de la fauna y flora de todo el país.
Agradecemos a nuestros amigos de la ABO (Asociación Bogotana de Ornitología): Pablo Casallas, Pedro Camargo y Sergio Chaparro que apoyaron y confirmaron la identificación y datos de este nuevo registro.
Autor: Daniel Bernal, daniel@humedalesbogota.com, twitter: @danielbernalb
Referencias:
- Libro: Birds of Colombia, Hilty and Brown. 1986. Princeton Paperbacks.
Estos son las cosas que me alegran el día, felicitaciones.
He notado con preocupación ausencia de colibrís en el Barrio Bosque Izquierdo, donde acostumbraban verse con frecuencia, comente con una amiga con quien compartimos este interés y ha notado al igual que yo que en los últimos días no ha visto ni un solo picaflor en zona cercana al parque de la Independencia.
Ocurre, doña Leonor Peñaranda, es que la mayor parte de los individuos del colibrí más común de la Sabana de Bogotá, (el llamado Colibri coruscans) durante los tres primeros meses del año, migran, según se cree, hacia zonas más bajas. Por eso es que durante estos días, se hace tan escasa su presencia en la ciudad. Dicho en otras palabras: esta es su época de tomar vacaciones. 🙂