Por: Erika Franco y Diana Figueroa
Un sábado frío y lluvioso como muchos otros, salieron de casa a recorrer uno de los escenarios naturales de la capital, que por sus innumerables problemáticas, pero sobre todo por su riqueza natural y arqueológica, tanto aprecian. Cerca de las 8:00 am se encontraron con los estudiantes de décimo grado del colegio Colsubsidio Las Mercedes, su docente y la trabajadora social, quienes han velado, con sus propias manos, por el cuidado de este ecosistema, el más cercano a su lugar de estudio: el humedal Jaboque.
Con muchas ansias emprendieron lo que sería una caminata de no menos de cinco horas, cuyo punto final sería el parque la Florida pasando por el “bosque” y pretendiendo observar algunos de los vestigios que los Muiscas dejaron en la Sabana de Bogotá: los Monolitos.
Por supuesto el guía, conocedor de este humedal desde hace más de 10 años quería contarles desde su perspectiva y experiencia, las maravillas naturales de Jaboque y la historia de lo que la gente llama ‘piedras’, así, añoraba la hora de llegar a ese punto del tercio bajo para enseñarles acerca de ellos.
Cuál sería la sorpresa de todos al llegar al barrio Villa Teresita, cuando se encontraron con una puerta en malla eslabonada, asegurada e impidiendo el paso en el espacio público. Enseguida surgieron muchas inquietudes en sus cabezas: ¡Que casualidad que hicieron el cerramiento justo donde comienza la obra de los edificios que invaden el humedal!; Si lo que quieren es impedir la entrada de habitantes de la calle y el arrojo de residuos, ¿porque no encerrarlo completo?
Con desilusión, el recorrido iba llegando a su fin, por factores ajenos a cada uno de los asistentes, sin más opción que bordear la barrera de metal dispuesta por la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, el grupo se reunió en un círculo a dar las observaciones finales dejando dudas, pero sobre todo ideas en cada uno.
Una de las grandes problemáticas del humedal es la inadecuada disposición residuos, cuya solución radica principalmente en la enseñanza y cultura a la comunidad acerca de los impactos negativos tanto para ellos mismos, como para el ecosistema. Iniciativas de recolección de residuos en estos espacios son destacables, pero se debe encaminar a soluciones preventivas y no únicamente correctivas, enseñando que, a causa de eso, el ecosistema no desarrolla eficientemente su trabajo de purificación de agua, alterando su comportamiento natural por el incremento de insectos y roedores portadores de enfermedades que, eventualmente, pueden llegar a las casa aledañas y finalmente las inundaciones tan nombradas en los períodos lluviosos en Bogotá.
Otra problemática, en este caso, con relación al ordenamiento del territorio, corresponde a las invasiones, ya no únicamente por desplazados o recicladores, sino por algunas constructoras ‘legales’ las cuales se pusieron a la tarea de comprar las pocas áreas inundables que quedan en este espacio para incrementar la propiedad horizontal de la ciudad.
Es bien sabido que el encerramiento de los humedales, es muchas veces la solución definitiva para evitar algunos problemas; Sin embargo, el encerramiento en ese punto no está garantizando a los habitantes, que los nuevos vecinos de los edificios no van a hacer de ‘su’ pedacito de humedal un botadero a cielo abierto.
Entonces, si esta es la solución, ¿Por qué no cerrarlo por completo? No permitir el acceso ni a los vecinos, ni a las constructoras, ni a los nuevos habitantes, ni mucho menos a aquéllos que ya tienen invadida la zona de ronda en la parte norte del humedal; En este sentido no es mejor una verdadera reserva natural y no un fraccionamiento parcial del ecosistema? las acciones sobre los humedales y en general sobre los ecosistemas deben ser planificadas y no improvisadas.
Por: Erika Franco (twitter: @FFErikaL ) y Diana Figueroa (twitter: @Dianis_Figueroa).
Completamente de acuerdo con el análisis del artículo. Realmente no es una solución para el ecosistema, lo que hacen es «privatizar» una zona del humedal con propósitos poco claros …Será que en el mejor de los casos, los habitantes del conjunto se dan a la tarea de cuidar su espacio? Muy dudoso y mucho menos efectivo cuando el 99% del humedal está «a la buena de dios» ….
Es una lástima que no sea posible hacer el recorrido completo …
Qué habrá pasado con la sonada declaración de la Secretaría de Ambiente de que iba a encerrar todos los humedales ? …. Ya se les olvido?
El cerramiento con malla en la Cra 115A barrio Villa Teresita fué solicitado y exigido por la comunidad que sigue y seguirá protegiendo el humedal jaboque dentro de sus capacidades sin ánimo de lucro,solo de corazón y amor a nuestro planeta tierra..culpamos al acueducto? a la secretaria de ambiente? a la car? a las curadurías? al govierno? o al vecino del humedal? !!MUY POCOS ASUMIMOS NUESTRA RESPONSABILIDAD!! «Respobsabilidad Social Tambien por favor» Cuando se quiera ingresar…por que es, un espacio público, la llave la maneja el grupo de guardas del humedal;Calle 70C No.113-71.
Es mejor fraccionado por el momento a que se deteriore totalmente.
Hay que ver que el ser humano es más destructor que constructor. «LA CULPA ES DE LA VACA» Un gran abrazo…hay que unir fuerzas y tejer redes positivas.
El cerramiento se solicitó y exigió en este punto (cra 115A)para poder seguir conservando y trabajando sin ánimo de lucro, nuestro humedal; Culpamos al Acueducto? a la Secretaría de Ambiente?a la CAR?al Gobierno?a las Curadurías? o ha los vecinos del humedal? Muy Pocos «ASUMIMOS RESPONSABILIDADES» La problemática más grande es la falta de APROPIACION como seres humanos.Es preferible verlo cerrado por partes a no ver nada,hasta verlo totalmente enmallado.
La VERDADERA manera de recuperar nuestro humedal jaboque es «Más Acción y Menos Crítica»…para poder entrar por dicha puerta se puede solicitar apertura en la calle 70C No.113-71 la Riviera con los Guardas de Seguridad del humedal. El hombre construye…pero tambien puede ser el peor destructor…un gran abrazo, !!el que persevera alcalsa!!